CREE…AUNQUE PAREZCA VACÍA.
“Jesús le dijo: ¡María! Volviéndose ella, le dijo: ¡Raboni! (que quiere decir, Maestro).” S. Juan 20:16
Ella se propuso llegar en la madrugada cuando aún estaba oscuro. Quería estar con él pero encontró la tumba vacía. Pensó que se lo habían llevado. Pedro y Juan fueron avisados por ella.
Ellos llegaron pero corrieron de allí al no ver el cuerpo. Ella se quedó. Nadie la sacaría de allí sin saber dónde estaría su cuerpo. Preguntó al extraño sobre el cuerpo de Jesús sin saber que era el maestro.
Sin reconocerlo preguntó, “si sabes dónde han llevado el cuerpo de mi maestro dime, yo lo llevaré”. Entonces él la llamó por su nombre. “María”. El primer encuentro del maestro resucitado fue con ella. A la primera que llamó por su nombre.
Y lo único que ella hizo fue…
MANTENERSE CREYENDO…AUNQUE LA TUMBA PARECIERA VACÍA.
Rubén Arroyo…Aunque parezca vacía.